Los crotones son una deliciosa guarnición que se utiliza en diversos platillos. Se trata de cubos de pan tostado, crujientes por fuera y suaves por dentro. Además de ser un excelente acompañamiento para sopas y ensaladas, también son perfectos para picar entre horas.
Para hacer crotones en casa, necesitarás pan duro, aceite de oliva, ajo y sal. El pan debe estar duro para que quede crujiente al tostarlo. Si no tienes pan duro, puedes cortar el pan fresco en cubos y dejarlo al aire libre durante unas horas para que se endurezca.
Para empezar, corta el pan en cubos de tamaño uniforme y precalienta el horno a 180 grados Celsius. En un tazón, mezcla el aceite de oliva con el ajo picado y la sal. Agrega los cubos de pan a la mezcla y revuelve para que se cubran por completo. Coloca los cubos de pan en una bandeja para hornear y hornea durante unos 10-15 minutos o hasta que estén dorados y crujientes.
Los crotones pueden ser sazonados con una variedad de especias para darles un sabor extra. Prueba con orégano, romero, tomillo o pimentón dulce para darles un toque de sabor adicional.
Los crotones son una excelente opción para agregar un toque de textura a cualquier platillo. Son particularmente deliciosos con sopas, ya que absorben el caldo y se vuelven suaves y deliciosos. También puedes usarlos para agregar un toque crujiente a las ensaladas o como un aperitivo saludable para picar entre comidas.
En resumen, hacer crotones es fácil y una excelente manera de darle un toque adicional a tus comidas. Con un poco de pan duro, aceite de oliva y especias, puedes crear una guarnición sabrosa y crujiente que hará que cualquier platillo sea aún más delicioso. Anímate a hacer crotones en casa y disfrutar de su sabor y textura en tus comidas favoritas.
